… y es que las ciencias avanzan que es una barbaridad! (Vamos con otro relato de José Vicente)
Así suelen terminar algunos chascarrillos y cierto es, que hoy día no sería cosa, pongo por caso, de ir desde Fermoselle hasta Zamora con un carro de varas y una mula por esos andurriales, despertando cantos a tropezones.
¡Pero qué categoría tiene el pote!
Entre los robots de hoy y el pote de ayer también hay diferencia, aunque desconfío que lo que hemos ganao en rapidez lo hemos perdido en sabor y me atrevo a decir que en identidad y ternura.


Algunos platos típicos de enero al pote
Por estas fechas patatas con «guesos» del morcón o unas puntas de costilla adobada. Otros días patatas con berzas y unos huesos del espinazo, namás pa darle gusto que estaban bien desengañaos (descarnaos), incluso con aquel rabo largulito poco bien chamuscao, si no se lo habían dao a los rapaces el día la matanza.
Una morcilla gorda y bien espitada por las dos puntas o una longaniza de las de charafallos bien empimentonada.
Unas patatas con unas raspicas de bacalao pa cenar algunos días, o solas (también llamadas viudas) los más d’ellos; o simplemente el pote con agua para meterle p’alli una «sacada» de manteca, de la del año pasao, y hacer unas sopas de ajo al estilo Sayago «tamien» pa cenar. Perdonarme el inciso, dije manteca del año pasao… cuantas veces de venderle una cantara de manteca al dulcero de Moral y gastar en casa la «atrasiada».
Unas alubias, pintas o blancas, unos frejoles en su tiempo con patatas en cachas pa que espesara el caldo. Unos garbanzos con tocino y longaniza, también de charafallos, o algo de pizpierno que le daba buen gusto.
Y seguimos con los menús, ¡A ver si te suena algún plato!
Cuando llegues a casa miras p’al pote, le añades agua si ves que tien falta y le «asoplas» al tizón hasta que vuelva a arrancar a cocer.
Ya se oían los «borbolletes», se movía la tapadera y salía vapor por el «aujero» y por «alrededor».
Si entraba alguien fácil sabría lo que teníamos pa comer, por el olorcico que daba. Poco mas o menos como en su casa… que mas a de dar!
Pollo con arroz en los «ofretorios» y de vez en cuando algún guisao de conejo o liebre que hubiera caído en algún lazo o hubiera «apañao» el perro, que ya se sabe que los pastores estaban cazando tol año.
Ahora el pote, en desuso
Salvo algún caso que otro hoy el pote, como mal menor sirve de adorno y guarda en su panza algún otro artilugio de cocina mas pequeño, o está en el portal con algún geranio moribundo que espera resucitar en primavera.
Que los potes se limpiaban con ceniza, igual que la caldera de la matanza, y que se compraban en Portugal en las romerías de La Luz y La Riberiña, ya lo sabíais vosotros, y el resto también. Yo solo he intentado recordaroslo.
Algunos refranes del mes de enero
Hoy en vez de pediros «la peseta» de otras veces os voy a decir un par de refranes del mes que estamos. Vamos a ello…
» Enero le come el sebo al carnero»
Refrán popular
Y otro más, un poco picante
«Para culo de mujer y para manos de barbero, siempre es enero»
Refrán popular
No quisiera que este último resultara ofensivo, de «tolas maneras, yo no lo he inventao» y estoy por apostar que»cuando yo vine al mundo el refrán ya estaba acá»
SALU A TODOS!
