Guti, el gran Guti, cerró temporada ayer en Torrefrades. Demostrando y demostrándonos que las noches de otoño no tienen por qué ser frías o aburridas.
Cerraba el ciclo de actuaciones en Sayago, tierra de la que «beben» sus monólogos, cuentos de antaño rebosantes de costumbrismo y folklore.

Lo que no esperaba Guti era recibir un sincero homenaje de muchos sayagueses que le aprecian y le agradecen su esfuerzo, en muchas ocasiones desinteresado, por traer un poquito del ayer, al «serano» del siglo XXI. Por esta razón, tras el picoteo y algunos «Cuentos para adultos» los asistentes le obsequiaron con una cesta de productos de la comarca.