Conocemos el origen de las aguas, las propiedades de los manantiales y un poco de historia y características del monumento megalítico más representativo de la comarca de Sayago
Hoy visitamos Almeida para visitar sus alrededores, de gran riqueza natural y arqueológica. La ruta de “espacios sagrados prehistóricos” nos lleva hasta el Hervidero de San Vicente, el manantial del balneario y la joya de la corona, el Dolmen de El Casal del Gato. De postre, un vídeo resumen realizado por Luis & Ana Foto ¿Te vienes?
¿Cómo llegar al hervidero de San Vicente?
Salimos de Almeida y, pasada la iglesia, tomamos el cruce de Carbellino. A 2,9 kilómetros dejamos la carretera y tomamos el camino que sale a la derecha y continuamos por él unos 400 metros hasta aparcar junto a un chalet con setos de arizónica. Desde allí visitaremos el hervidero, el dolmen del Casal del Gato y el Balneario.
El manantial de aguas sulfurosas
El conocido como «manantial de abajo» es el primer lugar que visitaremos. Pronto percibiremos un fuerte olor a huevos podridos, típico de este tipo de «manaderos». Al tacto, el agua tiene cierta «untuosidad» propia de este tipo de lugares. Nos sorprenderá apreciar las burbujas que provoca el hidrógeno sulfurado, de ahí que llamemos hervideros a estos lugares…
Agua, a 17 grados, todos los días del año… haga frío, o calor
Dicen los más viejos del lugar que el manantial del Hervidero nunca para de manar, incluso en periodos de larga sequía. Con una media invariable de 20.000 litros al día que siempre brota a la misma temperatura, 17 grados, sea invierno o verano.
¿DE DÓNDE VIENE EL AGUA DE LOS MANANTIALES DE ALMEIDA?
Una temperatura y caudal estable, demuestran que no hay conexión posible entre el manantial, las aguas del arroyo cercano y otros manantiales. Sin embargo, los geólogos no se ponen de acuerdo con la procedencia del líquido elemento. Para unos, la zona de recarga está en una falla cercana y, para varios investigadores del Departamento de Geología de la Universidad de Salamanca, en la conocida como Fosa de Ciudad Rodrigo. Según esta última teoría, las aguas del manantial de Almeida son de la misma procedencia que las del Balneario de Ledesma y los manaderos de Carbellino, Monleras, Trabanca, Fermoselle, Retortillo y algunos puntos de Portugal.
A estos dos interesantes estudios se suman las investigaciones del Instituto Geológico y Minero de España (IGME). Justo en la zona del manantial y balneario se fusionan dos tipos de roca. El granito más fino de Villamor de Cadozos y rocas más gruesas en Almeida. Ese cambio de densidad de la roca, permite el afloramiento de las aguas sulfurosas.
EL ORIGEN DEL BALNEARIO
El culto al agua vienen desde la antigüedad. Las tribus indígenas realizaban rituales de purificación durante el paso del solsticio de primavera a verano.
Los romanos, especialmente, consideraban los baños de aguas termales como un acto público y social. En la zona se han encontrado ases y sestercios que datan entre el 150 a.c y el 150 después de Cristo. ¿Por qué tantos restos romanos? Porque a menos de un kilómetro del manantial, ya en el término de Carbellino, existen restos de un importante poblado conocido popularmente como La Mina.
Ya en el siglo XVII se conocían los beneficios del agua de la zona y así queda reflejado en varios textos de Fray Francisco de Santa Catalina, regente del Convento de los Jerónimos de Zamora. En 1735 consta el primer análisis cualitativo de las aguas, realizado por Manuel Girón, boticario radicado en Madrid.
Ya en 1816, durante el reinado de Fernando VII, se declaran las aguas minero-medicinales de utilidad pública, proliferando los balnearios por toda España.
El edificio del Balneario de Almeida se proyectó en 1899, sin embargo, en su pozo eran habituales los baños de personas junto con animales. Por miedo al contagio de enfermedades, el Gobernador Civil de Zamora ordenó su clausura en 1881. Finalmente, el edificio se inauguró bien avanzado el siglo XX. Vivió su época de esplendor durante los años veinte y treinta hasta entrar en decadencia en los años 40. Tras decenas de años de abandono fue rehabilitado y puesto en marcha de nuevo en el año 2006.

Composición de las aguas del Balneario
Como no podía ser de otro modo, las aguas del balneario son sulfuradas de mineralización media y ricas en Litio y Radón. Si nos fijamos, en el hervidero de San Vicente y en el manantial del balneario, surgen hilillos blancos. Se trata de las sulfobacterias o sulfuraria, cuya función consiste en oxidar los sulfuros para liberar azufre. Esto hace que las aguas de la zona están especialmente indicadas para tratamientos de la piel (acné juvenil, sabañones, prurito y todo tipo de heridas), aunque también poseen propiedades beneficiosas para las articulaciones y el aparato respiratorio. El agua, dejada en reposo durante 48 horas pierde el olor a huevo podrido y puede consumirse perfectamente.

UN DOLMEN DE CORREDOR EN MEDIO DE LA ESTEPA SAYAGUESA
Frente al primer manantial, en una finca cercada, encontramos el Dolmen del Casal del Gato. Un dolmen es un santuario, un monumento sepulcral colectivo o individual.
Fue descubierto por el Padre Morán, sacerdote agustino e historiador, por indicación de José Manuel Ramos Vicente, de Almeida, telegrafista de Bermillo.
CARACTERÍSTICAS DEL DOLMEN



Se trata de un dolmen construido a finales del Neolítico. Empleado, en principio, como enterramiento de los miembros de una comunidad y, posteriormente, como cementerio en la Edad del Cobre.
Constaba de una cámara de planta circular de casi 6 metros de diámetro con grandes lajas graníticas hincadas, un cúmulo de tierra y un corredor de acceso orientado al sureste. Cuando fue descubierto sólo se conservaba el pasillo que era utilizado como refugio de pastores y apostadero para el reclamo de la perdiz por parte de los cazadores.
Varias excavaciones sacaron a la luz varios hallazgos: un cuchillo de sílex, un prisma hexagonal de cuarzo transparente, dos cuentas de collar, una hoja de puñal de cobre, una escudilla de barro oscuro y varios trozos de vaso y una hacha prehistórica. Algunas de estas piezas pueden verse en el Museo Arqueológico Nacional.
En los últimos años se ha consolidado el corredor y definido el espacio de la cámara tratando de recuperar la estructura perdida del monumento y renovando los carteles explicativos.
VÍDEO RESUMEN DE LA VISITA A LOS MANANTIALES Y EL DOLMEN DEL CASAL DEL GATO
Otros lugares para ver en Almeida de Sayago y alrededores
- Iglesia parroquial de San Juan Bautista (Almeida de Sayago)
- Puente del Rebollar (Almeida de Sayago)
- Ermita de Gracia (Villamor de Cadozos)
- Casco urbano de Escuadro: iglesia, fuentes y estelas romanas adosadas a las paredes
- Ermita de Santa Bárbara de Escuadro
- Carbellino
Fuentes consultadas para la elaboración de este artículo
Panero, J.A. (2005). Santuarios rupestres y espacios sagrados prehistóricos en Sayago. ADERISA.
Del Agua, M. L. (2009). Las aguas minero-medicinales del Balneario de Almeida. Medicina naturista, 3(1), 51-64.
[…] el mes de marzo aprovecharnos para irnos de ruta. La primera, por el Hervidero y el Dolmen del Casal del Gato de Almeida y, la segunda, por nuestras riveras floridas y […]
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[…] la cultura castreña se conserva también el castro de Carbellino y los dólmenes de Almeida y […]
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